Nuestra comunidad educativa está de fiesta. Nuestra Institución cumple 7o años, y son muchos los preparativos para celebrarlos. Setenta años que han hecho historia en nuestra región, han pasado por este claústro grandes hombres y mujeres que hoy prestan importantes servicios en diferentes campos. El llamado es a seguir siendo mejores cada día, a seguir trabajando por un mejor Cesar y por una mejor Colombia. Es mucho lo que podemos dar en el campo educativo, formando jovenes que participen en el proceso del sector empresarial a nivel regional y nacional.
viernes, 13 de marzo de 2009
jueves, 12 de marzo de 2009
Importaancia de las rondas
Las Rondas Infantiles son juegos colectivos de los niños que se transmiten por tradición. Se cantan con rimas y haciendo rondas con movimiento. En su mayoría han sido originarias de España y se han extendido por Latinoamérica.
Normalmente, cuando hay niños que juegan a rondas hay bullicio y algarabía y bulle la alegría del grupo con ingenuidad e inocencia.
Quién de los adultos no atesora en su memoria alguna remembranza de sus juegos infantiles, y haber participado en alguna ronda como "Sobre el Puente de Avignón", "Buenos Días Su Señoría, Mantantiru-Liru-lá", "Mambrú se fue a la guerra", "Aserrín, Aserrán" o alguna otra similar.
Normalmente, cuando hay niños que juegan a rondas hay bullicio y algarabía y bulle la alegría del grupo con ingenuidad e inocencia.
Quién de los adultos no atesora en su memoria alguna remembranza de sus juegos infantiles, y haber participado en alguna ronda como "Sobre el Puente de Avignón", "Buenos Días Su Señoría, Mantantiru-Liru-lá", "Mambrú se fue a la guerra", "Aserrín, Aserrán" o alguna otra similar.
Cucú, cucú,
cantaba la rana,
Cucú, cucú,
debajo del agua. (*)
Pasó un marinero,
Cucú, cucú,
llevando romero.
Cucú, cucú,
pasó una criada,
Cucú, cucú,
llevando ensalada.
Cucú, cucú,
pasó un caballero,
Cucú, cucú,
con capa y sombrero.
Cucú, cucú,
pasó una señora,
Cucú, cucú,
llevando unas moras.
Cucú, cucú,
le pedí un poquito;
Cucú, cucú,
no me quiso dar.
Cucú, cucú,
me puse a llorar.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)